Las largas horas de espera y las inclemencias del tiempo no han importado porque solo quieren saber dónde están sus seres queridos.
Al borde de las lágrimas, María Esther Martínez ha permanecido junto a las otras familias afuera de la Fiscalía de Guanajuato, esperando noticias de los jóvenes que la madrugada del miércoles fueron sustraídos a punta de pistola de un centro de rehabilitación para adictos.
"Un dolor y una angustia que dónde los vamos a buscar", dice Martínez.
Según contaron testigos a la Policía Municipal, los agresores despertaron violentamente a sus presas y se llevaron a más de 20 hombres y mujeres de distintas edades, en dos camionetas de doble cabina.
"A ver para dónde se los llevaron, para qué los quieren", dijo Rosa María Aguirre.
De inmediato, las familias de las víctimas fueron notificadas sobre el múltiple secuestro.
"Eso fue lo que nos avisaron, que se los habían llevado, habían llegado hombres armados", relata Martínez.
México
Pero también les dijeron que un grupo de internos habían aprovechado la confusión para correr y escaparse.
Los familiares de por lo menos 13 jóvenes confirmaron que ya los habían liberado, pero aseguran que tienen huellas de tortura y que los interrogaron sobre la distribución de drogas en Irapuato.
Las autoridades indicaron que nada está aún claro, pero continúan las investigaciones.
"No sabemos el número, tenemos un dato de 23, y 13 ya aparecieron, de los 10 que quedan sabemos que algunos ya se comunicaron con sus familias", afirmó el fiscal de Guanajuato, Carlos Zamarripa.
Sin saber a cuántos buscan, el operativo se ha extendido por toda la ciudad e incluso más allá del estado.
