MIAMI, Florida - Brian Rodríguez fue sentenciado a 30 días de cárcel tras declararse culpable de destruir las lápidas de Andrés Zacarias y Jenser Salazar.
En 2021, cuatro familias quedaron destrozadas cuando un conductor ebrio que iba a más de 100 millas por hora chocó contra sus seres queridos y los mató en Año Nuevo.
Después del entierro, cuando las familias apenas comenzaban a llorar su pérdida, Brian Rodríguez las atormentó al profanar las lápidas de Andrés Zacarias y Jenser Salazar, dos de los cuatro fallecidos en el accidente en West Flagler.
“No eres más que un ser humano cruel, de mal gusto, desagradable, poco amable y vicioso”, dijo Haydee Salazar, hermana de Jenser, al enfrentarse cara a cara con Rodríguez en el tribunal el viernes.
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Rodríguez, quien se grabó pintando con aerosol, martillando y pateando las tumbas y envió las imágenes a las familias de las víctimas, admitió su culpabilidad y se declaró culpable de allanamiento, vandalismo y destrucción de una tumba.
El joven de 27 años, que enfrentaba hasta 10 años de prisión, fue sentenciado a 30 días en una cárcel del condado Miami-Dade.
“No sientes remordimiento por lo que hiciste. No sientes remordimiento por lo que dijiste. Eso es algo que tuviste que hacer porque formaba parte del acuerdo”, dijo Ingrid Zacarias, hermana de Andrés.
Además de la cárcel, Rodríguez, quien no se disculpó en la corte, deberá escribir una carta de disculpa a las familias a las que atacó. Si la carta no es sincera, la jueza Carmen R. Cabarga intervendrá.
Después de ser liberado de la cárcel, el acusado estará bajo arresto domiciliario durante cuatro meses, seguido de 20 meses de libertad condicional. Rodríguez también deberá realizar 50 horas de servicio comunitario y recibir ayuda para su salud mental.
La jueza Cabarga también ordenó a Rodríguez pagar más de $1,000 a las víctimas como retribución.
Este acuerdo de culpabilidad llega casi un año después de que el conductor, Alex García, que causó el accidente mortal, fuera sentenciado a 14 años de prisión por conducir ebrio.
