Miramar y otras localidades del sur de Broward están pidiendo respuesta a Miami-Dade sobre el proyecto para construir una nueva planta incineradora que pudiera estar muy cerca de comunidades de este condado.
Yvette Colburne, comisionada de Miramar, ha hecho un llamado para que "se sienten con nosotros y escuchen lo que tenemos que decir", reflejando la demanda de mayor comunicación y consideración por parte de los responsables del proyecto.
Entre las ubicaciones consideradas para la planta, un sitio que anteriormente funcionaba como pista satélite del aeropuerto ejecutivo de Opa-locka destaca como el principal prospecto.
Este terreno, cerrado desde 2006 y que abarca 420 acres, se encuentra en la esquina noroeste de Miami-Dade, lo suficientemente alejado de comunidades de dicho condado pero cerca de urbanizaciones importantes en Miramar.
Manténte al tanto de las noticias locales y del estado del tiempo. Suscríbete a nuestros newsletters gratuitos aquí.
La preocupación de los residentes de Sunset Falls, Miramar, como Angela Daltromason y Rodrigo Mazón, se centra en las implicaciones para la salud y el impacto en el valor de las propiedades.
"El problema de salud es el más importante y también el precio de las casas", señala Daltromason. Por su parte, Mazón pone énfasis en "la salud de los niños que van a crecer en una situación como esta, al lado de donde van a quemar basura".
Si bien las regulaciones estatales y federales imponen límites a la emisión de residuos por parte de plantas incineradoras o de reciclaje, no existe una restricción específica sobre la proximidad de estas instalaciones a las zonas residenciales.
Local
Un ejemplo de ello es la planta incineradora del condado Broward, ubicada en Fort Lauderdale, cerca de áreas comerciales y residenciales.
Wayne Messam, alcalde de Miramar, expresó su descontento con la falta de transparencia en el proceso durante una conferencia de prensa, indicando: "hemos tenido quizá una llamada desde que fuimos a su reunión y mostramos nuestra oposición. No tenemos idea de los tiempos que están manejando o la evaluación que están haciendo".
En respuesta a las preocupaciones, la alcaldesa de Miami-Dade aseguró en un comunicado que “los tres sitios propuestos están siendo cuidadosamente revisados para seleccionar el que tenga los menores impactos ambientales y fiscales, garantizando así los más altos estándares de calidad del aire, salud humana y calidad de vida”.
“Se espera que los resultados iniciales se presenten a la Comisión del Condado y a todos los interesados más adelante este año, ofreciendo amplias oportunidades para la participación comunitaria”, agregó.