Claudia Sheinbaum, presidenta de México, aseguró hoy que su gobierno ya se prepara para recibir a miles de mexicanos que viven en Estados Unidos, si el presidente electo Donald Trump, llega a cabo su plan de deportaciones masivas de indocumentados.
Le daremos “la bienvenida a México a todos las y los mexicanos que por alguna razón son deportados desde EEUU”, dijo Sheinbaum.
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Adrian López López, quien tiene más de 3 décadas trabajando en el campo sin estatus legal, dice estar listo para enfrentar el cambio. Como el están los más de 840 mil trabajadores agrícolas que se encuentran en el país, según cifras del Departamento de Agricultura de Estados Unidos.
“Pienso echarle más ganas e irme para México, al pueblo donde yo nací”, dice López.
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Thomas Kennedy, portavoz de la Coalición de Migrantes de la Florida, dice que “muchas de esas personas quieren quedarse en este país que es su nuevo hogar adoptivo”.
Kennedy señala la falta de una reforma migratoria con camino a la ciudadanía para los inmigrantes, a pesar de ser la fuerza trabajadora agrícolas más grande el país. “Muchos tienen sus carreras, sus negocios, emprendimientos, sus hijos que muchos son ciudadanos, tienen toda su vida acá, la palabra que diría es angustia”.
Eduardo Flores, director del Centro Comunitario y Laboral de UCM, advierte que “hay varias industrias que con las deportaciones, van a faltar trabajadores y van a subir los precios en las tiendas”.
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Para enfrentar el proceso, Sheinbaum anunció un programa de atención que iniciará en los consulados mexicanos. “Estamos haciendo un programa para mayor contratación de abogadas y abogados que atiendan a nuestros hermanos allá”.
A pesar de que existe la visa H2A para trabajadores agrícolas temporales, la presidenta dijo también que “la mejor manera de disminuir la migración, es atendiendo de fondo la causa de la migración, que es la necesidad, la pobreza”.
“Lo que realmente necesitamos es una reforma migratoria comprensiva que aporte un camino a la ciudadanía, que no se ha dado desde 1986 y el congreso tiene que legislar eso”, apunta Kennedy.
Un grupo de unos 1.500 migrantes salió caminando el domingo por la noche del sur de México, en la tercera caravana que se forma desde la victoria electoral del estadounidense Donald Trump hace menos de un mes.
En los últimos años ninguna caravana ha llegado al norte del país porque son dispersadas por las autoridades mexicanas.
