Llega una esperanza de alivio para quienes tienen préstamos estudiantiles en Estados Unidos. La administración del presidente Joe Biden dio a conocer el nuevo programa “SAVE” por sus siglas en inglés, que reduciría y hasta eliminaría los pagos mensuales de acuerdo a los ingresos, lo cual ha sido bien recibido por muchos.
Tras la decisión de la Corte Suprema de anular el perdón de deudas estudiantiles, el plan SAVE ofrece una solución a los graduados que por sus bajos ingresos no pueden comenzar a pagar sus deudas, y también a futuros beneficiarios.
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"Yo tengo deudas estudiantiles, mi esposo también y tenemos un hijo ... con la economía y con lo caro que está todo es algo que nos trae mucha tranquilidad al menos", reconoce Kerelyne Escobar.
Algunos como ella y su familia podrían ver eliminados sus pagos mensuales, según los estándares federales de pobreza. Por ejemplo, un graduado con un salario de 32,805 dólares y una familia de cuatro con un ingreso de 67,500 dólares anuales no tendrían pagos mensuales.
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La solicitud para beneficiarse del pago definido por los ingresos se hace en la página web STUDENTAID.GOV, y toma solo 10 minutos.
Ahí deberá iniciar un proceso de 6 etapas, que comienza con una autorización de la transferencia de la información sobre sus impuestos. Seguidamente tendrá que actualizar su información para contactarle y luego verificar la información de su préstamo.
Con solo un click se determina su elegibilidad y el interés a pagar. Luego sigue la confirmación de la información personal y financiera, y en el caso de las personas casadas, se les pedirán los datos de cónyuge.
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Deberá subir al sistema documentos que prueben sus ingresos, para luego hacer una estimación del pago mensual, basado en ingresos y total de la deuda.
El Departamento de Educación estima que alrededor de un millón de personas verán su deuda perdonada, en tanto millones se beneficiarán con una reducción de pagos a la mitad, o un perdón de deuda tras 10 años de pago.
Pero para algunos, las bondades del plan llegan tarde, como para Nelson Ortega, cuya deuda original de 25 mil dólares ya se ha duplicado por los intereses. "Cuando yo termine de pagar los préstamos estudiantiles, el total va a ser entre 50 y 53 mil dólares".
