Una niña de 14 años acusada de matar a su abuela de 79 años en Lauderdale Lakes en mayo fue sentenciada a un programa juvenil después de declararse no culpable de la muerte, dijeron los fiscales.
Sofia Koval se declaró culpable de un cargo de homicidio involuntario en un tribunal de adultos el miércoles y fue sentenciada inmediatamente a hasta tres años en el programa de compromiso de máximo riesgo del Departamento de Justicia Juvenil de Florida, dijo la Oficina del Fiscal del Estado de Broward.
Después de cumplir la pena máxima en el programa, estará bajo supervisión comunitaria hasta los 21 años, aunque se espera que sea transferida a custodia federal para su deportación a su natal Ucrania porque no es ciudadana estadounidense, dijeron los fiscales.
Koval fue acusada por el asesinato el 23 de mayo de Yevheniia Koval, de 79 años, que había sido encontrada golpeada hasta la muerte.
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La presunta paliza ocurrió en un apartamento en los Pearl Condominiums en Northwest 41st Street. Las autoridades acudieron al lugar tras recibir una llamada sobre una mujer que no respondía. Se encontraron con el hijo de Koval, que dijo que había ido a visitar a un amigo desde las 7 p. m. hasta las 12:30 a. m. y había dejado a Koval con su hija de 14 años.
Dijo que cuando regresó, encontró a Koval inconsciente en el suelo con raspaduras en el cuello y hematomas en la cara, los brazos y las piernas, dijeron las autoridades.
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Según un informe de arresto, la adolescente le dijo a su padre que su abuela la había arañado y que "golpeó a la víctima varias veces con un cinturón" para defenderse. Luego comenzó a llorar y dijo que "sentía lo que había hecho".
Yevheniia Koval fue trasladada de urgencia al Broward Health Medical Center, donde fue declarada muerta.
En un informe de arresto redactado, la adolescente supuestamente le dijo a alguien en ucraniano que "la víctima ya se estaba muriendo y que ella la había ayudado a morir". Esa persona le dijo que la palabra ucraniana que usó la adolescente no tenía una buena traducción al inglés, pero eso era lo que estaba diciendo.
Según el padre de la adolescente, Sofia Koval se había mudado recientemente de Ucrania y estaba mostrando "problemas de conducta, que él creía que se debían a la guerra que presenció en Ucrania y a que la habían separado de su madre", según un informe del arresto. Le había quitado el teléfono el día del asesinato para disciplinarla.
La oficina del fiscal estatal dijo que los fiscales se reunieron extensamente con la familia de la víctima antes de aceptar el cambio de declaración de la adolescente, y dijo que el hijo de la víctima, que también es el padre de la adolescente, "apoyó plenamente el resultado y agradeció a la fiscalía, la defensa y el juez por cómo habían manejado el caso".
La pena máxima a la que se enfrentaba la adolescente era de hasta 15 años de prisión para adultos.
El juez que supervisaba el caso le dijo a Koval que si violaba alguno de los términos de su sentencia en el futuro, sería enviada de regreso a él y podría enfrentar esa sentencia máxima de 15 años.
"Debido a la naturaleza atroz del crimen y después de considerar todo lo presentado por la defensa, creo que es apropiado que este caso se transfiriera a un tribunal de adultos y que se impusieran sanciones para menores", dijo el fiscal estatal de Broward, Harold Pryor, en un comunicado el miércoles.
"Consideramos todas las opciones y trabajamos en estrecha colaboración con la familia de la víctima y con los abogados defensores de la Oficina del Defensor Público de Broward para llegar a una resolución adecuada que la haga responsable, pero que también tenga en cuenta su edad y las circunstancias de este delito".
