Sus padres esperan que algún funcionario de salud les explique qué pasó.
Yunior no logra contener las lágrimas al ver los videos de su sobrina, a quien recuerda como una niña feliz y muy saludable.
Se los enviaron desde Cuba el pasado lunes 7 de octubre, horas antes de que Paloma Domínguez Caballero recibiera la vacuna que apagó su vida, con apenas un año acabado de cumplir.
Con el paso de algunas horas, tras ser vacunada la situación de la niña se tornó mucho más preocupante.
Ya en el hospital, Paloma fue trasladada el martes pasado a una sala de terapia intensiva, en estado crítico.
Según denuncia la familia, ninguna autoridad sanitaria ha respondido a sus preguntas. Fue este sábado, tres días después de la muerte de Paloma, que el ministerio cubano de salud pública habló en una nota oficial de su deceso, tras haber recibido la vacuna PRS, que se importa desde la India.
La nota de las autoridades cubanas reconoce que hay más niños con síntomas similares a los de Paloma.
Desde Cuba y Miami, la familia de la pequeña dice que no piensa descansar hasta que se haga justicia.
