Una madre de dos niños perdió todos sus ahorros después de hacerle una transferencia por Zelle a una persona desconocida y, por motivos que aún desconoce, los estafadores tomaron el control de su cuenta bancaria.
“Mi vida cambió totalmente a partir del 27 de julio, a las 12:25 de la tarde”, recuerda Gisselle con exactitud. Ella recibió una llamada telefónica, supuestamente de su banco, las personas le dijeron que en su cuenta había transacciones sospechosas.
“Mi reacción fue poner la llamada en alta voz y entrar a mi banco en línea para chequear lo que estaba pasando”, cuenta la víctima de estafa que en ese momento observó como alguien tomaba el control de su cuenta.
“Yo entré en pánico”, relata. “¿Cómo es esto? Mi dinero se está desapareciendo”, se cuestionó. “Yo no estoy utilizando el Zelle en este momento. ¿Cómo es esto?
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Allí comprendió que la llamada no provenía de su banco, sino de estafadores que en cuestión de minutos le vaciaron su cuenta. “Perdí 2398 dólares que era lo que yo tenía para cubrir los gastos míos”.
Las transacciones fraudulentas fueron a un número telefónico que ella había registrado en su cuenta días antes. “Yo conocí a esta persona en el lugar donde yo estaba trabajando. Le compro tres prendas y el método que uso para hacerle el pago, es Zelle”.
Todo eso se lo explicó a la policía al presentar un reclamo en el banco, sin embargo Wells Fargo no repuso su dinero.
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“Que no había nada que investigar, que eso no había sido ningún tipo de fraude, que eso había sido desde mi teléfono”, le dijeron.
Fue entonces que presentó una queja ante la oficina de protección financiera del consumidor y contactó a Telemundo 51.
En un correo electrónico, Wells Fargo dijo: “Estamos trabajando directamente con nuestro cliente y, después de recibir información adicional, nos complace haber podido resolver este asunto”.
“Cuando mi dinero regresó volví a ser yo. Mi familia y yo fuimos afectados por esto, y gracias a Dios, mi familia y yo pudimos poner nuestras cuentas al día”.
De la mala experiencia se llevó una lección que ahora comparte con todos. “No le puedes pasar Zelle a cualquier persona desconocida. Cuando te entre una llamada, no hagas como yo, que no supe manejar la situación. Cuelgas y llamas a tu propio banco”.
