Arys María Martínez y Jacob Alexander Howard, ambos de 34 años, se conocieron en enero de 2021 y se casaron el día de San Valentín de 2022, según registros judiciales.
No pasó mucho tiempo antes de que la violencia doméstica llegara al registro público.
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En abril de 2022, Howard fue arrestado por un cargo de agresión doméstica después de que Martínez les dijera a los agentes que la estranguló durante una discusión, hasta el punto de que ella se desmayó. La pelea continuó durante horas, dijo, y en un momento lo golpeó con un plato para defenderse. Los agentes fueron llamados después de que Martínez enviara una foto de su rostro sangrando y su ojo hinchado a su abogado, según el informe.
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Al día siguiente, Martínez solicitó una orden judicial de protección contra la violencia doméstica contra Howard, diciendo que pateó una puerta de la habitación donde ella buscó refugio después de confrontarlo por “usar drogas nuevamente”. Cuando intentó irse, Howard tomó sus llaves, “me arrojó de regreso a la habitación y me estranguló”, escribió en la petición.
“Le rogué que se detuviera, agarró el vaso, me arrojó al suelo… (y) me cortó la cara con el vaso”, dijo.
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Si bien se concedió una orden judicial temporal, Martínez no se presentó a una audiencia del 9 de agosto de 2022 en la que se podría haber ordenado una orden judicial permanente, por lo que la orden temporal fue desestimada.
Para entonces, sin embargo, Howard no había impugnado dos delitos graves derivados del incidente: agresión agravada con arma mortal y agresión doméstica. El 23 de junio de 2022, un juez denegó la sentencia de culpabilidad y lo puso en libertad condicional de tres años, durante los cuales debía recibir una evaluación de salud mental, continuar con asesoramiento e ingresar a un programa de intervención para agresores.
Se sabe gracias a los registros públicos que logró no meterse en problemas durante el siguiente año y su hija, Amelia Rose Martinez, nació el 8 de junio de 2023.
Pero el 18 de julio de 2023, los agentes fueron llamados nuevamente a su casa y Martínez les dijo que Howard “tenía una sobredosis en el dormitorio”, afirma el informe, que lleva un sello que identifica a Howard como “POSIBLE DELINCUENTE VIOLENTO DE PREOCUPACIÓN ESPECIAL”.
Howard rechazó la atención médica.
Martínez luego le dijo al oficial que Howard había estado abusando físicamente de ella varias veces en los últimos meses y que tenía miedo de denunciarlo.
Le mostró al agente un video de Howard golpeándola mientras ella sostenía a su bebé.
También contó un incidente en mayo cuando, según ella, Howard agarró su arma, la apuntó con ella y luego a su cabeza y dijo que la bebé que aún no había nacido “estará mejor sin nosotros dos”.
En total, describió varios incidentes que llevaron a Howard a ser acusado de encarcelamiento falso, agresión agravada con arma mortal y tres cargos de agresión doméstica.
Martínez solicitó otra orden de restricción, diciendo que Howard necesitaba tratamiento y terapia por uso de drogas y que temía por la seguridad de su hija hasta que “él esté limpio nuevamente”.
Al igual que la medida cautelar anterior, esta fue desestimada al no presentarse a una audiencia para hacer la orden permanente.
El arresto provocó que se violara la libertad condicional de Howard, pero en una audiencia del 11 de agosto, el estado estipuló que no era un peligro para la comunidad y un juez estuvo de acuerdo, según los registros judiciales. Citando los vínculos comunitarios, la condición mental y los esfuerzos de recuperación de Howard, el juez le permitió continuar en libertad condicional.
Y el 28 de agosto, el estado se negó a procesar a Howard por los cargos penales derivados del arresto de 2023.