Legisladores republicanos del sur de Florida reafirmaron su compromiso de presionar a la administración Biden para que adopte una postura firme en apoyo a los líderes legítimos de Venezuela. Esta declaración fue realizada en medio de una creciente preocupación por la situación política y electoral en el país sudamericano.
El congresista Mario Díaz-Balart fue contundente al expresar la necesidad de un apoyo decidido: "Nosotros vamos a presionar a esta administración para que se ponga del lado de Venezuela y de los líderes legítimos de Venezuela".
Los congresistas no solo mostraron su apoyo a la causa venezolana, sino que también criticaron las acciones recientes de la administración Biden. María Elvira Salazar, otra destacada congresista republicana, señaló que siempre fue un error confiar en el régimen de Maduro: "Como republicanos, siempre supimos que darle el beneficio de la duda al régimen de Maduro no era una buena idea".
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Estas críticas se centran en la reciente decisión de aliviar algunas sanciones con la esperanza de facilitar elecciones transparentes en Venezuela, una medida que consideran ingenua y contraproducente.
Carlos Giménez, otro congresista republicano, expresó su descontento con el proceso electoral venezolano y las acusaciones infundadas del fiscal general de Venezuela contra María Corina Machado por supuesto hackeo electoral.
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Giménez destacó los riesgos que estas acciones representan para la democracia y la seguridad regional: "Es una burla a nosotros, al proceso democrático. Yo le tengo pena al pueblo venezolano que tenía tanta esperanza para esta elección".
Además, Giménez advirtió sobre la creciente influencia de países como Cuba, Nicaragua, Rusia y China en el hemisferio occidental: "Ellos: Cuba y Nicaragua están estableciendo bases para Rusia y China aquí en nuestro hemisferio, es una amenaza para nosotros aquí en Estados Unidos".
Desde la Casa Blanca, el secretario de Estado, Antony Blinken, manifestó su profunda preocupación por los resultados preliminares anunciados por el Consejo Nacional Electoral de Venezuela: "Nos preocupa seriamente que el resultado anunciado no refleje la voluntad ni los votos del pueblo venezolano. Es fundamental que cada voto se cuente de manera justa y transparente".
La situación ha generado una ola de reacciones internacionales. Argentina ha exigido mayor transparencia y un recuento de votos, mientras que el presidente chileno, Gabriel Boric, también expresó su apoyo a la democracia en Venezuela. En un paso más drástico, Panamá decidió suspender relaciones diplomáticas con Venezuela y retirar a su personal diplomático del país.
