FORT LAUDERDALE - El esperado desfile de celebración de los Florida Panthers comenzó con un retraso de casi 40 minutos debido a una fuerte lluvia en la playa de Fort Lauderdale. A pesar del clima adverso, el evento fue un rotundo éxito y miles de fanáticos disfrutaron de cada momento.
"Estamos emocionados con la lluvia, pero aquí estamos con esperanza y energía", expresó un entusiasta seguidor de los Panthers durante el desfile.
Para muchos, como María, este momento marcó un hito inolvidable. "Esto nunca había sucedido en mi vida. Es la primera vez que ganamos la Stanley Cup", compartió emocionada.
Niños, adultos, estadounidenses y latinos se unieron para celebrar el campeonato histórico de los Florida Panthers en la NHL después de una espera de 30 años. La playa de Fort Lauderdale se convirtió en el epicentro de una fiesta sin igual.
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"Todos somos latinos aquí", afirmó María, destacando la diversidad y la unidad entre los aficionados.
Larry, otro fanático, confiaba en la victoria desde el inicio. "Los Oilers eran buenos, pero honestamente sabía que las Panteras iban a ganar", comentó con satisfacción.
La emoción era palpable entre los presentes. "Es una emoción total, estoy feliz", expresó Zahira, reflejando el sentimiento generalizado de alegría y orgullo.
Los fanáticos no pudieron contener su emoción al ver a sus héroes con la codiciada copa. Muchos derribaron las barreras metálicas para estar más cerca de los campeones, quienes también descendieron de los autobuses para celebrar con la multitud.
"Barkov, Bobby, vimos a Tkachuk, Rodríguez nos tomó un selfie... fue increíble", dijo entusiasmado Brandon Villa.
Mathew Tkachuk, jugador clave de los Panthers, compartió su gratitud con los seguidores. "Este ha sido el día más grandioso de todos. Gracias por todo, pero lo más importante son ustedes, los fanáticos, que me han dado el mejor momento de mi vida", expresó emocionado.
La caravana concluyó en una tarima donde se realizó la ceremonia oficial de consagración del título. Tkachuk y sus compañeros agradecieron a la multitud, haciendo de este domingo una fiesta inolvidable para los amantes del hockey.
"Viví aquí en Estados Unidos desde el 89, así que vi al primer equipo llegar a la Stanley Cup. Ahora, participar en esto con mis hijos y amigos es increíble", compartió Christopher Corso, visiblemente emocionado.
A medida que la celebración llegaba a su fin, el tráfico comenzaba a recuperar la normalidad. La ciudad deshabilitó varios puentes levadizos en Las Olas para facilitar la restauración del orden vehicular. Hasta el momento, no se reportaron incidentes graves de seguridad.
¡Felicidades a los campeones por este logro histórico!
