Lo que hemos visto en West Palm Beach y Washington D.C. en estas últimas horas es un reflejo del espíritu en el país: unos celebran, otros asumen y procesan la derrota. En medio de todo esto, el proceso de transición de poder ya está en marcha.
Casi 24 horas después de la cita inicial y con el discurso que ningún candidato quiere dar, la vicepresidenta Kamala Harris reconoció su derrota y la del Partido Demócrata en la contienda por la Casa Blanca. En la Universidad de Howard, donde visualizaba aparecer como presidenta electa, tuvo que hablar, en su lugar, de una transferencia de poder.
“Un principio fundamental de la democracia estadounidense es que, cuando perdemos las elecciones, aceptamos los resultados. Ese principio, al igual que otros, distingue a la democracia de la monarquía o la tiranía”, señaló Harris, y sostuvo haber hablado telefónicamente con Donald Trump, a quien ofreció su disposición para el cambio de mando.
“En nuestra nación, debemos lealtad no a un presidente o a un partido, sino a la Constitución de los Estados Unidos”, agregó Harris.
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Horas antes, Biden telefoneó a Trump y lo invitó a la Casa Blanca. Un vocero de Trump declaró que la reunión ocurrirá próximamente y que el presidente electo agradeció la llamada.
Entrada la madrugada del miércoles, en su discurso, Trump habló de conciliación: “El éxito nos unirá y vamos a comenzar por priorizar a América”.
Trump llamó “realineación histórica” a los significativos votos de las minorías en el país que lo apoyaron. “Vinieron de todas partes … con uniones, sin uniones; afroamericanos, árabe-americanos”.
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Parte de su triunfo se debió al apoyo de los hombres latinos, que favorecieron a Trump por un margen de diez puntos, después de respaldar a Biden por 23 puntos hace cuatro años, según una encuesta de salida de urnas.
A todo esto, en el Capitolio, la mayoría del Senado se inclina hacia el rojo, mientras la Cámara todavía cuenta votos, poniendo hasta ahora a los republicanos en ventaja con 22 posiciones.
Este miércoles, el jefe de gabinete de Biden puso en marcha los primeros procesos administrativos para iniciar la transición. Se espera que esta semana el presidente electo forme su equipo con este fin y el comité de toma de posesión.
