El caso penal contra Alex Díaz de la Portilla, ex senador estatal y ex comisionado de Miami, llegó oficialmente a su fin en una audiencia celebrada esta mañana. El juez encargado del caso, quien también habría presidido el juicio, reconoció la falta de evidencia sólida para sostener las acusaciones, lo que llevó a la fiscalía de Broward a retirar los cargos de corrupción pública en su contra.
Díaz de la Portilla, quien no asistió a la audiencia, reaccionó mediante un mensaje de texto afirmando: “La verdad siempre gana”. Estas palabras reflejan su postura desde el inicio del proceso, cuando calificó los cargos como un ataque político.
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En septiembre de 2023, el ex comisionado fue arrestado bajo 14 acusaciones graves, incluyendo lavado de dinero, soborno, compensación ilícita y violaciones de las leyes de financiamiento de campañas.
Según los fiscales, Díaz de la Portilla presuntamente aceptó $245,000 a cambio de apoyar un proyecto para la construcción de una instalación deportiva.
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Sin embargo, durante la audiencia de hoy, el juez Miguel de la O destacó las debilidades del caso:
“Pensé que iba a ser un caso muy difícil de probar para el Estado en el juicio, así que no me sorprende la decisión que tomó la fiscalía,” afirmó.
El abogado de Díaz de la Portilla, Ben Kuehne, calificó la decisión como un paso positivo, pero no dejó de subrayar el impacto que el proceso tuvo en su cliente.“Esta ha sido una tortura durante más de un año”, comentó, haciendo referencia al daño a la reputación y a la destitución de su cliente en medio de las acusaciones.
Kuehne también recordó que el arresto de Díaz de la Portilla ocurrió justo antes de una elección, lo que afectó su campaña para la reelección como comisionado. Menos de dos meses después de su detención, perdió la contienda electoral, aunque en aquel momento se mantuvo firme en su intención de demostrar su inocencia y recuperar su posición.
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La falta de testigos clave y evidencia concreta fue crucial para la decisión de retirar los cargos. Aunque inicialmente el caso parecía sólido, la fiscalía reconoció que no tenía los elementos necesarios para probar su alegato en un juicio.
“Aplaudo la decisión de la fiscalía,” concluyó el juez de la O, sugiriendo que el caso nunca tuvo el peso suficiente para proceder.
A pesar del cierre del caso, el futuro político de Díaz de la Portilla sigue siendo incierto. Aunque no ha confirmado si buscará nuevamente un cargo público, el impacto de las acusaciones y el tiempo fuera de la esfera política podrían influir en sus próximos pasos.
