En corte se presentó este jueves, Asiel Fuentes Quintana, quien llegó esposado y vestido de blanco para escuchar sus cargos por el violento ataque a una mujer de la tercera edad en La Pequeña Habana, que resultó ser su suegra.
“Agresión física, hurto mayor y agresión física a una persona de la tercera edad” fueron los cargos que le impusieron al hombre, luego de que presuntamente, ingresó el pasado lunes, muy temprano a uno de los apartamentos dela cuadra 2507 del noroeste con la calle 16.
Según una declaración de la víctima, el sospechoso estaba en el baño, con guantes y cubriendo su rostro con una toalla cuando ella lo sorprendió robando.
El informe de arresto de Fuentes Quintana, dice que su reacción fue a los golpes, dándole puños en la cara hasta que la tiró al suelo.
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La víctima “tiene 73 años, ella le rogaba, le decía que estaba enferma que era una señora mayor”, por lo que según los detectives, la víctima sufrió varias contusiones.
Después de la golpiza “le puso una toalla por encima de la cabeza y le dijo: ‘usted puede salir después que se cierre la puerta’”.
Un video de seguridad de un vecino supuestamente ayudó a identificar al hombre, cuando caminaba por el pasillo antes del intento de hurto.
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Según el reporte del arresto, “le mostraron el video a la hija de la víctima y ella pudo identificar al acusado” como su esposo.
Fue ahí cuando la historia dió un giro inimaginable. Fuentes Quintana terminó siendo el yerno de la víctima. La esposa, según los detectives, declaró que esa mañana no pudo encontrar las llaves del apartamento de su mamá dentro de su cartera.
El acusado de 35 años de edad permanecerá en la cárcel, sin derecho a fianza. Según los detectives, el sospechoso le escribió a su esposa diciéndole que intentó entregarse en una estación de policía y culpó a las drogas por lo que había hecho con su suegra.
