El gobernador Ron DeSantis dijo que el sur de la Florida podría pasar muy pronto a la Fase 2 de la reapertura económica.
Al destacar las mejores cifras en el combate al coronavirus en el sur de la Florida, DeSantis aseguró que podría mover pronto a los condados Miami-Dade, Broward y Palm Beach a una fase menos restrictiva del plan estatal de reapertura.
La tasa de resultados positivos en las pruebas en Miami-Dade cayó al 9.7 por ciento, mientras el de Broward descendió al 6.1 por ciento, los niveles más bajos desde el 21 de junio. Si la tasa disminuye a un 5 por ciento y mientras se mantega esa tendencia entonces estaremos listos.
“Creo que el siguiente paso será mover nuestros tres condados del sur de la Florida a la Fase 2. Miami-Dade estuvo hoy por debajo de 10 por ciento por primera vez desde junio", dijo DeSantis durante una actividad en Orlando.
"Si veo las tendencias en estos condados, hemos tenido una tendencia a la baja por varias semanas", agregó.
Aunque los detalles deberían consultarse con los líderes de cada condado, la Fase 2, que ha estado en vigencia en el resto del estado desde principios de junio, podría significar:
- Capacidad al 50 por ciento para restaurantes, cines y salas de conciertos, con algunas precauciones.
- Los gimnasios y las tiendas podrían operar a capacidad completa, aunque también con ciertas precauciones.
- Los bares permanecen cerrados en el estado por otra orden del gobernador, pero DeSantis dijo que hay conversaciones con los dueños de negocios lo que podría llevar a que las restricciones se levanten en el futuro.
Local
Para la epidemióloga Dadilia Garcés "el condado que tiene más casos ahorita y es altamente afectado sigue siendo Miami-Dade pero por primera vez después de mucho tiempo está por debajo del 10%. Como estado yo pienso que estamos listos a partir de principios de la próxima semana. Como condado de Miami-Dade probablemente a finales de la próxima semana o principios de la otra".
Durante la fase 2 no se incluye la reapertura de las escuelas y el regreso a las clases presenciales algo que alivia a algunos como Karla Hernández, presidenta de la Unión de Maestros de Miami-Dade "lo que no queremos es que se hagan decisiones prematuras, sin suficiente ciencia, sin suficientes datos y bajo presión. Que sean porque es lo correcto, porque la situación está controlada y tenemos los recursos necesarios para abrir de una forma sana para los estudiantes".
