El gobernador de Florida, Ron DeSantis, señaló este lunes que cualquier condado o ciudad del estado que obligue a vacunarse a sus empleados enfrentará una multa de $5,000, una medida que refuerza su posición frente a las exigencias de vacunas contra el COVID-19.
“No vamos a permitir que la gente sea despedida por un mandato de vacunas", dijo este lunes el gobernador DeSantis, quien amenazó a ciudades y condados con multas de hasta $5,000 por cada trabajador a quien le exijan estar vacunado.
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"Son millones y millones de dólares en multas potenciales", insistió el gobernador durante una rueda de prensa en Gainseville, donde el gobierno local les ha dicho a sus empleados: o se vacunan antes de fin de mes, o serán despedidos.
“Tenemos una ciudad que quiere implementar un mandato, sabemos que la ley dice que eso se puede hacer. Lo nuevo es que el gobernador ha dicho: no, yo no lo voy a permitir. Esto es un área muy gris y estamos esperando muchos litigios”, dijo J. Freddy Perera, abogado
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En Miami-Dade podrían estar dispuestos a desafiarlo, aunque las políticas no son tan estrictas: los empleados tienen la opción de vacunarse o someterse a exámenes semanales.
En el caso de la policía, para nuevas contrataciones, será más riguroso.
Tendrán que presentar una prueba de vacunación y si solo han recibido una primera dosis, deben cumplir con las pruebas de COVID-19 semanales hasta que estén completamente inmunizados.
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“Muchos de estos bomberos y policías ya pasaron el coronavirus y están recuperados. Los están obligando a pesar de que científicamente, tienen una protección muy fuerte”, dijo DeSantis.
La ley firmada por el gobernador incluye a las empresas privadas, sin embargo, hasta el momento la administración DeSantis no ha dicho si tambien estarían sujetas a las multas.
Tienen el derecho bajo la ley de requerir que los empleados tengan esta vacuna. Si hay dos excepciones: si la persona dice que por sus creencias religiosas no puede recibir la vacuna o por alguna condición física o médica.
