La modernización del sistema vial en el sur de la Florida avanza a paso firme con dos proyectos multimillonarios que prometen cambiar el panorama urbano y optimizar la movilidad. Sin embargo, estas mejoras no llegan sin inconvenientes: los constantes cierres en autopistas clave han generado retos para residentes y visitantes, obligándolos a adaptar sus tiempos de viaje y rutas diarias.
Uno de los proyectos de mayor envergadura se desarrolla en la intersección de Golden Glades, donde la construcción de 32 nuevos puentes busca mejorar la conectividad entre cinco sistemas viales esenciales: I-95, Palmetto Expressway (826), Florida’s Turnpike, State Road 9 y State Road 7. Esta obra, cuya culminación está prevista para 2031, pretende reducir tiempos de viaje y descongestionar el tráfico en una de las zonas más transitadas de la región.
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Sin embargo, mientras los beneficios a largo plazo son prometedores, los conductores enfrentan constantes interrupciones en sus rutas habituales.
“Hay que salir con más tiempo, no veo otra solución. Nos toca acostumbrarnos a vivir así”, expresó Paula Moreno, residente afectada por los desvíos.
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El gerente del proyecto, Enmanuel Espinal, explicó que los cierres nocturnos serán una constante en esta fase de construcción.
“Los conductores deben estar atentos a los cierres. Por ejemplo, este fin de semana, los carriles express de la I-95 en dirección norte estarán cerrados desde el viernes 14 de marzo a las 11 p.m. hasta el lunes a las 5 a.m.”, detalló Espinal.
Otro punto neurálgico de la transformación vial es la construcción de un nuevo puente en la autopista 836, que estará en desarrollo hasta 2027.
En esta zona, uno de los cierres más significativos afecta la rampa de la I-95 en dirección norte hacia el oeste de la SR 836, que permanecerá cerrada entre las 10 p.m. y las 5:30 a.m. durante el fin de semana.
Andrés Berisiartu, gerente del proyecto, explicó la estrategia utilizada para minimizar el impacto en los conductores.
“El trabajo se realiza tanto de día como de noche. Durante el día, limitamos las operaciones a zonas que no interfieran con el tráfico. Los cierres de carriles solo ocurren en horarios nocturnos o de menor actividad para garantizar la seguridad en las operaciones”, indicó.
Para los ciudadanos, estos cambios son un arma de doble filo: si bien reconocen la importancia de las mejoras, los inconvenientes diarios generan molestias.
“Es malo porque la gente necesita llegar a sus trabajos y le quita tiempo”, comentó Rosalba Ruiz, una turista afectada por los cierres.
Por otro lado, otros conductores como Flor Molano optan por ver el panorama con mayor optimismo.
“A veces es incómodo por la lentitud, pero si es para un futuro con mejor movilidad, hay que aguantar un poco”, opinó.
Las autoridades recomiendan respetar las señales de desvío y planificar un tiempo adicional de viaje para evitar contratiempos.
Además, el Departamento de Transporte ha implementado diversas estrategias para mantener informados a los conductores, incluyendo pantallas electrónicas en las autopistas, correos electrónicos, redes sociales, comunicados de prensa y mapas interactivos.
Para obtener detalles actualizados sobre los cierres y desvíos, los ciudadanos pueden visitar Southflroad.com.
A pesar de las dificultades actuales, la modernización de estas infraestructuras promete una Florida del Sur más conectada y eficiente en el futuro.