AUSTIN, Texas - Una jueza de Texas concedió este jueves a una mujer embarazada un permiso para abortar en un desafío sin precedentes a la prohibición estatal que entró en vigor después de que el derecho al aborto fuera anulado a nivel federal en 2022 por la Corte Suprema.
No estaba claro qué tan rápido o si Kate Cox, una madre de dos hijos de 31 años del área de Dallas, podrá abortar. La jueza de distrito estatal Maya Guerra Gamble dijo que otorgaría una orden de restricción temporal que permitiría a Cox abortar. Es probable que el estado apele esa decisión.
Cox tiene 20 semanas de embarazo y los médicos dicen que su feto tiene un defecto terminal. Sus abogados le dijeron a Gamble que Cox fue a una sala de emergencias esta semana por cuarta vez desde su embarazo.
Texas es uno de 13 estados que prohíben el aborto en casi todas las etapas de gestación. Si bien Texas permite algunas excepciones, médicos y mujeres han argumentado en los tribunales que la ley es tan restrictiva y tan imprecisa que los médicos son renuentes a practicar abortos por temor a ser enjuiciados.
Manténte al tanto de las noticias locales y del estado del tiempo. Suscríbete a nuestros newsletters gratuitos aquí.
Los médicos de Cox le han dicho que el bebé probablemente morirá al nacer o a lo máximo vivirá unas pocas semanas, según la demanda presentada en Austin.
“Kate Cox necesita un aborto y lo necesita ahora”, dice la demanda.
La demanda fue presentada una semana después que la Corte Suprema de Texas escuchara argumentos sobre si la prohibición es excesiva para casos de mujeres con embarazos complicados. El caso es uno de los desafíos más grandes a las prohibiciones sobre abortos en Estados Unidos, aunque un fallo del tribunal totalmente compuesto por republicanos podría tardar meses.
Cox tuvo a dos hijos previos vía cesárea. Se enteró en agosto de este año que estaba embarazada y pocas semanas después los médicos le dijeron que su bebé tenía alto riesgo de tener una condición llamada trisomía 18, que conlleva un alto riesgo de pérdida del embarazo, muerte al nacer o poco tiempo de vida, según la demanda.
Los médicos le dijeron a Cox que si el bebé muere en el vientre, la labor de parto podría causarle ruptura uterina debido a las cesáreas previas, y que otra cesárea podría poner en peligro su capacidad para tener otro hijo.