SAN JOSÉ, California - Juan Carlos Ulloa es un padre soltero, y junto a su hijo Junior, de 3 años, vivió lo imposible para llegar de Colombia a San José.
"Yo lo que quiero es darle un futuro a Junior, y la he guerreado, la he luchado y como muchos compatriotas e inmigrantes que vienen, pero me siento orgulloso de que soy padre soltero, y la he guerreado con un niño y no le he dado mal ejemplo", aseguró el inmigrante.
El padre de familia dijo que salió de Colombia por la violencia y llegó a California porque le dijeron que había trabajo. Pero la realidad fue otra, y desde hace ocho meses vive en su auto con su pequeño en las calles de San José.
Y aunque explicó que han logrado mantener una vida digna, necesitan una vivienda temporal para seguir adelante.
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"Tocamos no una, sino miles de puertas, y tengo una lista así de larga con todos los números de todos los albergues y de todas las ayudas de los condados, de Santa Clara, de no sé qué, pero hay en especial una materia prima que todos los albergues rigen a ese sitio", dijo Juan Carlos.
Él aseguró que cada intento lo llevó al mismo número de teléfono. Se trata de la línea de ayuda "Here4You" del condado Santa Clara.
"Lastimosamente... tiene una larga lista de espera en la que pueden tardar varios meses en conectar a estas familias con recursos de vivienda temporales", aseveró Kathryn Kamiskin, directora interina de la Oficina de Apoyo a la Vivienda del condado Santa Clara.
EEUU
En el caso de Juan Carlos y Junior, les dijeron que la espera sería de seis a ocho meses, y que el tiempo depende de los recursos que tenga el condado. Pero desde hace unos meses, esos recursos son menos.
En el 2023, el condado se unió a organizaciones locales tras el fin del Título 42, dando $710,000 de fondos únicos específicamente para dar vivienda temporal y recursos a familias inmigrantes. Pero los fondos se terminaron este verano, y al momento no hay planes de renovar la inversión.
"Motivamos a que sigan llamando, porque estamos abriendo nuevos refugios familiares que pueden agilizar la lista de espera y conectarlos a vivienda permanente", aseveró Kamiskin.
Mientras, Juan Carlos indica que su hijo es su motivación, por lo que todos los días lo lleva a la guardería y busca arreglar su estatus migratorio. Explicó que ya logró conseguir permiso de trabajo y se gana la vida con un puesto en el sur de San José, donde vende chuzos de carne, pollos colombianos y limonada casera.
El hombre tiene un mensaje para otros inmigrantes que acaban de llegar a Estados Unidos: "Que este país no es como se lo imaginan o se lo sueñan, el país de las maravillas y las oportunidades, pero cuando uno quiere, uno lo logra. Si yo pude con un niño de tres años sobresalir y conseguir lo que he conseguido, es porque sí se puede".