LOS ÁNGELES, California - A poco más de una semana de abrir el puente de la Calle Sexta, la policía se vio obligada a cerrarlo, debido al peligroso y mal comportamiento exhibido por algunos residentes.
Según autoridades, unos quemaban llanta, mientras otros se treparon a lo alto de los arcos de la estructura, y fue tanta la gente que se congregó en este nuevo puente que la policía no tuvo otra alternativa más que cerrarlo y desviar el tráfico por varias horas la madrugada del lunes.
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Quemando llanta fue como un conductor decidió estrenar el puente de la Calle Sexta. Y no fue el único.
Ahora, la comunidad se empieza a preocupar.
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“Ojalá y lo agarren por hacer carreras clandestinas porque está muy peligroso”, dijo Margarita Bonilla, quien camina sobre el nuevo puente.
La división anti-carreras clandestinas de la policía respondió a lo que estaba sucediendo en el puente, pero le dijeron a Telemundo 52 que no hubo ni un solo arresto.
Cientos de vehículos se congregaron en el puente que conecta Boyle Heights con el centro de Los Ángeles, y algunos hasta se treparon peligrosamente a lo más alto de los arcos que adornan y sostienen la impresionante estructura, que fue abierta al público hace poco más de una semana.
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“Está limpio. Esperemos que siga así porque ya ve como está todo, pero está bien bonito, está bien hecho”, dijo Bonilla.
Pero el tráfico y el comportamiento riesgoso de esta madrugada obligó a la policía a cerrar el puente por completo.
De acuerdo a oficiales, han estado teniendo que lidiar con problemas de este tipo desde que el puente se inauguró.
“Es poco después del medio día, y hay bastante tráfico, mire lo que están haciendo estas personas, se han detenido y están atravesados a medio puente, tomando fotos”, dijo.
Por casualidad, una patrulla los sorprendió y se dio la vuelta en u para obligarlos a que se movieran", dijo.
“Es increíble. Es una conexión en donde los vehículos están bloqueando el puente que conecta a la ciudad, es una lástima”, agregó Bonilla.
La vista panorámica de los gigantescos edificios en la ciudad de Los Ángeles, desde el puente, es impresionante, y sin duda seguirá atrayendo a quienes caminan o hasta patinen sobre el puente, y tal vez las autoridades tomen acción contra los que insisten en comportarse de forma imprudente. La policía dijo que tiene suficientes patrullas vigilando el puente.
Recuerde que no hay camellón dividiendo los carriles, así que una derrapada de los que están haciendo donitas o arrancones, puede fácilmente terminar trágicamente.
