A medida que EEUU atraviesa una grave crisis energética que no tiene visos de superarse fácilmente ante la falta de suministros de petróleo y de gas natural. Se espera que esta escasez provoque un gran aumento en los precios de la electricidad para los estadounidenses.
Así lo indicaron las proyecciones de la Administración de Información Energética (EIA por sus siglas en inglés), donde se reveló que las tarifas residenciales de electricidad alcanzarán este 2022 sus niveles más altos desde 2008.
Entre los estados donde se pronostica mayor aumento radican Florida, Hawaii, Illinois y Nueva York, donde la EIA estima que los costos de energía aumentarán un 15% en comparación a hace 12 meses.
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Si bien parte del aumento de precios se debe a una combinación de inflación e incrementos de temporada, expertos financieros del banco Barclays alegan que los costos de energía han subido a nivel internacional también a causa del conflicto entre Rusia y Ucrania, pues el conflicto ha impactado fuertemente los suministros de petróleo.
Además del petróleo, los precios del gas natural también se han duplicado en los últimos meses debido a que los productores estadounidenses han enviado más combustible a Europa.
Tan solo a principios de enero, el precio de una unidad térmica británica de gas natural costaba tan solo $3.20 dólares. Pero ahora el precio radica en $8.5 dólares por unidad.
El precio del carbón también ha sufrido un aumento significativo recientemente. En enero, una tonelada de carbón radicaba en $131, pero ahora está en $403.
En total, Barclays estima que una factura de electricidad promedio en EEUU será un 40% más cara este 2022 a diferencia del 2021.
¿Cómo puedes ahorrar en tu factura?
Las nuevas tarifas llegarán justo cuando el clima sea más cálido y la gente suba de intensidad su aire acondicionado.
Aún así, hay varias formas de conservar energía y ahorrar unos cuantos dólares en su factura de electricidad. He aquí algunos consejos a seguir según NerdWallet:
- Revisa los sellos en las ventanas, puertas y electrodomésticos.
- Arregle los conductos con fugas.
- Revisa tu termostato.
- Ajusta la temperatura de tu frigorífico y/o congelador.
- Tomar duchas más cortas.
- Reemplaza el cabezal de ducha.
- No laves la ropa en agua caliente.
- Repara los grifos que gotean.
- Ajusta la temperatura de tu calentador de agua.
- Compra electrodomésticos de bajo consumo.
- Pregunta por las tarifas con descuento.
- Cambia tus bombillas.
- Instala reguladores de intensidad.
- Usa regletas inteligentes.
- Haz una auditoría energética.