Ambos políticos aseguraron que trabajan en conjunto por el bienestar de los afectados por el huracán Ian
El presidente Joe Biden llegó este miércoles al aeropuerto de Fort Myers, en el suroeste de Florida, donde hizo una visita al corazón del desastre ocasionado por el huracán Ian, que ha dejado decenas de muertos y "daños catastróficos".
El mandatario inspeccionó la devastación dejada por el huracán y prometió reunir el poder del gobierno federal para ayudar a reconstruir las zonas, mientras consolaba a los residentes locales junto al gobernador republicano Ron DeSantis, un enemigo potencial en 2024. Ambos hombres declararon que estaban dejando la política a un lado por ahora.
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“Hoy tenemos un trabajo y solo un trabajo, y es asegurarnos que las personas en Florida obtengan todo lo que necesitan para recuperarse por completo”, dijo Biden en la comunidad del suroeste del estado que sufrió la peor parte de la furia de Ian.
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“Va a llevar mucho tiempo, con suerte sin ningún inconveniente en el camino”, dijo. “Más tarde, después de que las cámaras de televisión hayan pasado, todavía estaremos aquí contigo”.
Previamente, DeSantis y su esposa Casey saludaron al presidente y a la primera dama, Jill Biden, cuando llegaron a Fisherman's Wharf, donde las casas y los negocios yacían en ruinas en medio de escombros y lodo después del paso del huracán Ian la semana pasada.
Biden y DeSantis hablaron solos junto a un bote que la tormenta había llevado a un café, luego se movieron por separado entre los residentes locales afectados por el huracán.
El alcance de la devastación fue inmenso. La caravana de Biden pasó junto a árboles azotados por el viento, algunos arrancados de raíz, otros con ramas arrancadas por la tormenta. Los campos lejos de la carretera todavía estaban inundados, formando lagunas estancadas.
Volaron los letreros de tiendas y restaurantes; colchones arruinados se apilaban en las calles de los barrios, un edificio se inclinaba hacia un lado como una pieza de ajedrez. Una armada de trabajadores y camiones de reparación luchó con la recuperación.
EXTIENDEN AYUDAS POR OTROS 30 DÍAS
Este mismo miércoles, Biden extendió por otros 30 días el plazo de ayudas para la remoción de escombros y la implementación de medidas de emergencia para los afectados por el huracán Ian en el estado de Florida.
Según la declaración de desastre mayor emitida por el presidente el pasado 29 de septiembre, se pusieron a disposición de Florida fondos federales para la remoción de escombros y medidas de protección de emergencia, incluida la asistencia federal directa, por un plazo de 30 días, el cual hoy se ha duplicado.
La FEMA dio a conocer el martes que aprobó más de $70 millones para los sobrevivientes de Ian en Florida, donde de acuerdo a las cifras oficiales 72 personas han muerto directamente a causa de Ian, pero los medios que llevan su propia cuenta hablan de más de un centenar.
Ian tocó tierra el pasado miércoles en Cayo Costa, una pequeña isla en el suroeste de Florida, con vientos máximos sostenidos de 240 km/h y dejó vías y puentes destrozados que dejaron incomunicadas varias islas de cara al Atlántico.
SIGUEN LABORES DE RESCATE
Los equipos de FEMA en la zona están verificando el estado de los sobrevivientes, ayudando con las solicitudes de asistencia federal por desastre y respondiendo a las preguntas sobre los tipos de asistencia federal disponibles.
Las más de 280,000 demandas presentadas hasta ahora a las compañías de seguros por daños en propiedades superan ya los $2,000 millones, según la oficina estatal de Florida que regula el tema de seguros.
De las 107 muertes reportadas por NBC News como vinculadas a Ian por los forenses de los distintos condados afectados, 55 ocurrieron en el condado Lee, donde está Cayo Costa, el lugar por donde Ian entró en Florida.
VISITA A PUERTO RICO
En esa zona es donde estará Biden, quien el lunes visitó Puerto Rico, que sufrió graves daños por el huracán Fiona, anterior a Ian, que también golpeó a República Dominicana.
En Puerto Rico prometió más ayuda para la recuperación, concretamente $60.6 millones para obras que mitiguen las inundaciones en determinadas áreas de la isla.
"Es probable que (Ian) se clasifique entre los peores (huracanes) en la historia de la nación", dijo Biden el viernes al hablar del desastre causado en el suroeste de Florida.
"Todos ustedes han visto en la televisión casas y propiedades aniquiladas. Va a llevar meses, años reconstruirlo. Nuestros corazones están con todas aquellas personas cuyas vidas han sido devastadas por la tormenta. El corazón de Estados Unidos se está rompiendo literalmente", subrayó.
La acción del presidente pone fondos federales a disposición de las personas afectadas, en forma de subvenciones para viviendas temporales y reparaciones del hogar, préstamos de bajo costo para cubrir pérdidas de propiedad no aseguradas y otros programas para ayudar a las personas y propietarios de negocios a recuperarse.
Los fondos federales también están disponibles para los gobiernos estatales y locales elegibles y ciertas organizaciones privadas sin fines de lucro.
