- La Asociación de Hospitales de Niños y la Academia Estadounidense de Pediatría le dijeron al gobierno de Biden que los "niveles sin precedentes" de RSV combinados con el aumento de la circulación de la gripe están llevando a algunos hospitales al límite.
- Le pidieron al gobierno federal que declarara una emergencia para brindarles a los hospitales mayor flexibilidad para enfrentar el aumento.
- Los bebés de 6 meses o menos están siendo hospitalizados con RSV a una tasa siete veces mayor que la observada antes de la pandemia del COVID-19 en 2018, según datos de los CDC.
Los médicos están pidiendo al gobierno de Biden que declare una emergencia en respuesta a un "aumento alarmante" de niños hospitalizados con virus respiratorio sincitial y gripe esta temporada.
Noticias de Florida 24/7 en Telemundo 51.
>La Asociación de Hospitales Infantiles y la Academia Estadounidense de Pediatría advirtieron al presidente Joe Biden y al secretario de Salud, Xavier Becerra, en una carta esta semana que los "niveles sin precedentes" de RSV combinados con el aumento de la circulación de la gripe están llevando a algunos hospitales al límite.
Los bebés de 6 meses o menos están siendo hospitalizados con RSV en más de siete veces la tasa observada antes de la pandemia del COVID-19 en 2018, según datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). Las hospitalizaciones por influenza también están en su punto más alto en una década y los niños y los ancianos corren mayor riesgo, según los CDC.
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>A medida que aumentan los virus respiratorios, más de las tres cuartas partes de las camas de los hospitales pediátricos están ocupadas en EEUU, según datos del Departamento de Salud y Servicios Humanos. Diecisiete estados informan que más del 80% de las camas están llenas, según los datos. Los hospitales de niños en Arizona, el Distrito de Columbia, Maine, Minnesota, Rhode Island, Kentucky y Utah están casi completamente llenos.
Una declaración de emergencia brindaría a los hospitales la flexibilidad necesaria para liberar capacidad de camas y personal para garantizar que los niños reciban la atención que necesitan, dijeron a Biden y Becerra en la carta de esta semana el director ejecutivo de la Asociación de Hospitales Infantiles, Mark Wietecha, y el director ejecutivo de AAP, Mark Del Monte.
El presidente debería declarar una emergencia bajo la Ley Stafford o la Ley Nacional de Emergencias, y el secretario de salud debería declarar una emergencia de salud pública, escribieron Wietecha y Del Monte.
“Necesitamos apoyo financiero de emergencia y flexibilidades en la misma línea de lo que se proporcionó para responder a los aumentos repentinos de COVID”, escribieron.
EMERGENCIAS ESTATALES
El aumento de niños que se enferman con virus respiratorios se produce en medio de la escasez de personal, ya que muchos trabajadores de la salud han cambiado de carrera o se han jubilado debido al agotamiento de la era de la pandemia.También hay un gran número de niños hospitalizados por problemas mentales, lo que también está agotando la capacidad.
El Colegio Estadounidense de Médicos de Emergencia, en una carta a Biden a principios de este mes, advirtió que los departamentos de emergencia se encuentran en un "punto de ruptura" ya que el volumen de pacientes supera las camas con personal. Los hospitales a menudo se ven obligados a retener a los pacientes en los departamentos de emergencia porque no hay camas para pacientes hospitalizados disponibles, lo que puede resultar en largas esperas, atención disminuida y malos resultados para los pacientes. ACEP calificó la situación como una emergencia de salud pública.
Oregón se convirtió esta semana en el primer estado en declarar una emergencia en respuesta al aumento de RSV. La gobernadora Kate Brown dijo que la declaración apoyará a los dos hospitales pediátricos del estado mediante el despliegue de equipos médicos voluntarios de emergencia.
La tasa de hospitalización pediátrica de Oregón se ha más que triplicado desde finales de octubre, según la oficina del gobernador. Un portavoz del Departamento de Salud y Servicios Humanos dijo que el gobierno federal está ofreciendo apoyo a las comunidades caso por caso.
Se determinaría una emergencia nacional de salud pública en función de los datos de todo el país, las tendencias científicas y el conocimiento de los expertos en salud pública, dijo el vocero. Altos funcionarios de salud de EEUU, en una llamada con los periodistas a principios de este mes, dijeron que el gobierno federal está trabajando con socios estatales y locales para aliviar los problemas de capacidad en los hospitales a medida que aumentan las enfermedades respiratorias.
Dawn O'Connell, subsecretaria de preparación y respuesta, dijo que los equipos de salud federales y los suministros médicos en la reserva nacional están disponibles para los estados cuando sea necesario. Hasta ahora, ningún estado ha solicitado este nivel de apoyo, dijo O'Connell.
SE DUPLICAN LAS TASAS DE HOSPITALIZACIÓN DE RECIÉN NACIDOS
Los funcionarios de salud pública en los EEUU han pedido repetidamente a todas las personas elegibles que reciban su refuerzo de COVID-19 y la vacuna contra la gripe para ayudar a aliviar la carga de enfermedades respiratorias este invierno. No existe una vacuna para el RSV.
Alrededor de 171 de cada 100,000 bebés menores de 6 meses fueron hospitalizados con RSV durante la semana que finalizó el 12 de noviembre, según el sistema de vigilancia de los CDC que rastrea 12 estados. Eso es más del doble de la tasa de hospitalización por RSV para recién nacidos el año pasado y más de siete veces la tasa en 2018, la última temporada completa antes de la pandemia del COVID-19.
La gripe está hospitalizando a aproximadamente 10 de cada 100,000 niños menores de 5 años, según datos de los CDC. La tasa de hospitalización de estos niños es la más alta de una década y aproximadamente el doble de la tasa nacional general actual. Cinco niños han muerto de gripe en lo que va de temporada, según los CDC.
El RSV y la gripe están aumentando en parte porque las personas han abandonado en gran medida las medidas de salud pública implementadas durante el punto álgido de la pandemia de covid, como el uso de máscaras y el distanciamiento social, que suprimieron la circulación de estos virus, según el Dr. José Romero, director de National de los CDC del Centro de Inmunizaciones y Enfermedades Respiratorias.
Romero, durante una llamada con reporteros a principios de este mes, dijo que muchos niños no se infectaron con RSV en los últimos dos años debido a las precauciones de salud del coronavirus. Como consecuencia, muchos niños no desarrollaron ninguna inmunidad y están contrayendo el virus por primera vez. La primera infección tiende a ser más grave.
El RSV es un virus respiratorio común que casi todos los niños contraen antes de los 2 años. Normalmente causa síntomas leves similares a los de un resfriado, pero el virus puede ser peligroso para bebés de 6 meses o menos, así como para niños en edad escolar que tienen un sistema inmunitario débil. Es la principal causa de hospitalización de bebés en los EEUU, según los CDC.
SIN CONDICIONES SUBYACENTES
RSV causa inflamación y congestión en las vías respiratorias inferiores, llamada bronquiolitis. Los bebés a menudo necesitan soporte de oxígeno porque sus vías respiratorias son más pequeñas y la inflamación les dificulta la respiración.
También suelen necesitar líquidos por vía intravenosa durante varios días porque están deshidratados o no se alimentan bien. Alrededor del 2% de todos los bebés son hospitalizados con RSV y el 79% de los hospitalizados menores de 2 años no tienen condiciones médicas subyacentes. Hasta 300 niños menores de 5 años mueren anualmente a causa del RSV, según los CDC. Children's Hospital Colorado está "a punto de estallar" principalmente debido a un aumento de casos de RSV, dijo el Dr. Sean O'Leary, pediatra y experto en enfermedades infecciosas. Las camas para pacientes hospitalizados y la unidad de cuidados intensivos están llenas, dijo O'Leary.
El departamento de emergencias del hospital instaló una carpa afuera para ver a los pacientes. El personal que normalmente no trabaja en la sala de emergencias se está tomando horas para ayudar, y la clínica primaria también está agregando horas para ayudar a aliviar la presión, dijo.
"Estamos rompiendo récords del censo para la historia del hospital todos los días. No tiene precedentes", dijo O'Leary, quien también es vicepresidente del comité de enfermedades infecciosas de la AAP. El Comer Children's Hospital en Chicago ha estado lleno durante dos meses, dijo la Dra. Allison Bartlett, pediatra y experta en enfermedades infecciosas.
RSV llegó antes y con mayor fuerza este año que en el pasado, dijo Bartlett. Muchos de los niños hospitalizados tendieron a ser mayores este año, de 2 años o más, probablemente porque no se infectaron durante la pandemia, dijo.
El UPMC Children's Hospital en Pittsburgh ha enfrentado un gran aumento de enfermedades respiratorias desde septiembre, dijo el Dr. Raymond Pitetti, director del departamento de emergencias del hospital. El aumento comenzó con RSV, pero ahora los casos de influenza se están disparando, dijo Pitetti.
Alrededor del 20% de los niños que son llevados al hospital con enfermedades respiratorias ingresan y unos cinco niños terminan en la unidad de cuidados intensivos diariamente, dijo.
LLENAS LAS CAMAS DE HOSPITALES
Algunos días el hospital está lleno y los niños deben permanecer en la sala de emergencias hasta que se abre una cama para pacientes hospitalizados, dijo Pitetti, pero UPMC ha podido crear nuevas camas todos los días para sacar a los niños de la sala de emergencias.
Más del 80 % de las camas en Children's Healthcare Atlanta han estado llenas durante los últimos meses, dijo la Dra. Andi Shane, jefa de epidemiología del hospital. RSV comenzó a circular durante los meses de verano y luego aumentó a principios de septiembre, dijo Shane. Luego, más niños comenzaron a contraer la gripe a principios de octubre cuando los casos de RSV comenzaron a disminuir, dijo.
“Tuvimos COVID, luego tenemos RSV, luego tenemos influenza”, dijo Shane. "Entonces, básicamente, cuatro meses sin descanso y muchos, muchos niños que necesitan atención en la sala de emergencias, atención urgente, hospitalizaciones. Ha sido un gran desafío mantenerse al día con todos esos niños".
La actividad de la gripe es más alta en Alabama, Georgia, Mississippi, Carolina del Norte, Carolina del Sur, Tennessee, Virginia y Washington, D.C., según datos de los CDC. Arkansas, Luisiana, Maryland, Nuevo México, Nueva Jersey, la ciudad de Nueva York y Texas están experimentando altos niveles de enfermedades similares a la gripe.
En el sureste, la cepa de influenza A H3N2 parece ser la más común en este momento, dijo Romero de los CDC a los periodistas a principios de este mes. Esta cepa se asocia con una enfermedad más grave en los ancianos y los niños pequeños, dijo.
NO VACUNADOS
Casi todos los niños hospitalizados con gripe en Children's Healthcare Atlanta no han recibido su vacuna anual, dijo Shane. Parte del problema es que el virus llegó temprano este año, por lo que la gente no tuvo tiempo, dijo.
"Por lo general, decimos que se vacune contra la gripe antes de Halloween. Bueno, para Halloween, teníamos mucha, mucha, mucha gripe aquí en Georgia", dijo Shane.
Además de la vacunación, los funcionarios de salud pública alientan a las personas a quedarse en casa cuando estén enfermas, evitar el contacto cercano con las personas enfermas, cubrirse al toser y estornudar y lavarse las manos con frecuencia.
Aquellos que quieran tomar precauciones adicionales también pueden usar una máscara en público. Romero dijo que los padres deben buscar atención médica inmediata para sus hijos si muestran alguno de los siguientes signos de advertencia: dificultad para respirar, labios o cara azulados, dolor en el pecho o en los músculos, deshidratación (boca seca, llanto sin lágrimas o no orinar durante horas), o no estar alerta o interactivo cuando está despierto.
Actualización: esta historia se actualizó para incluir los últimos datos de RSV para la semana que finalizó el 12 de noviembre y los datos de ocupación de camas pediátricas.