BOSTON - Un club que causó un alboroto en la comunidad de Lebanon, Connecticut celebró su primera reunión el viernes. El Club Satánico, un programa afterschool se reunió en la Escuela Primaria Lebanon.
La formación del club ha obtenido apoyo, generado críticas e incluso posibles acciones legales.
"Tuvimos una gran participación. Tuvimos muchos padres que se quedaron solo durante la primera reunión para ver qué estaban haciendo los niños”, dijo June Everett, directora nacional de After School Satan Club.
El club celebró su primera reunión el viernes con 12 alumnos inscritos.
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“Teníamos un montón de actividades STEM diferentes en las que los niños mayores estaban trabajando para armar, cosas que se iluminaban y giraban”, dijo Everett.
El club fue solicitado por un padre local en respuesta a un club cristiano, el Good News Club quienes se reúnen en el mismo campus.
“Muchos padres reconocen el hecho de que no son necesariamente cristianos. No se sienten cómodos enviando a su hijo al un club religioso, pero se sintieron absolutamente cómodo estando con nosotros hoy”, dijo Everett.
Afuera del edificio se llevó a cabo una oración improvisada.
"Estamos aquí para orar contra el mal, los espíritus malignos que están aquí y que han sido traídos a esta escuela y que ponen a nuestros niños en peligro", dijo Claudia Catani, de Niantic.
La gente que se reunió durante la oración desaprueba el Club de Satanás.
“Satan Club ni siquiera es apropiado para la edad de la escuela primaria para lo que están trayendo aquí”, dijo Catani.
Este acontecimiento provocó que un miembro de la comunidad de Lebanon amenazara con demandar al distrito escolar, diciendo que es necesario que haya una separación entre la iglesia y el estado.
Quiere que el Club de Satanás y el Club Good News sean expulsados de las instalaciones escolares y le preocupan posibles tensiones.
“Simplemente siento que mi hijo y los hijos de otras personas en la ciudad están siendo utilizados como peones en esta batalla religiosa, por así decirlo”, dijo Andrew Vining, residente.
Nos comunicamos con el superintendente para pedirle comentarios sobre la primera reunión del Club de Satnás, pero no se recibió respuesta. En una declaración anterior, dijo que el distrito debe permitir el acceso de organizaciones externas a las instalaciones escolares independientemente de sus opiniones religiosas según la primera enmienda.
Las interacciones entre el Club de Satanás y los orantes se mantuvieron pacíficas en la escuela primaria. Si hay algo en lo que están de acuerdo es en el ejercicio de los derechos de la primera enmienda.
"La gente tiene derecho a la igualdad de acceso a los espacios públicos y tiene derecho a protestar pacíficamente", dijo Everett.
"Respetamos los derechos de la primera enmienda de la organización, de estar aquí y tener un club extracurricular y son independientes del sistema escolar, pero también tenemos el derecho de la primera enmienda de decir que no estamos contentos con lo que está pasando", dijo Christine Rebstock, de Middletown.
Everett dijo que el club continuará reuniéndose mensualmente en la escuela con la posibilidad de realizar más reuniones el próximo año si el club crece.
